Este proyecto se realizó en colaboración con la empresa Chorro Naval y se centró en el estudio y la propuesta de mejoras en el cabezal de granallado utilizado por los operarios de la empresa. Este objetivo fundamental se concretó en dos sub-objetivos principales: reducción del nivel ruido del proceso de granallado metálico y rediseño del cabezal de granallado que incluyese un aumento en la utilidad de los sistemas de seguridad, un aumento de la manejabilidad y una disminución en el peso del cabezal.
Para la reducción del nivel de ruido se llegó a la conclusión de que el único tipo de diseño razonable era el basado en una ralentización del flujo mediante una expansión, idea que ya se había planteado previamente pero nunca aplicada a flujos con partículas.
En cuanto a la empuñadura, tras analizar con detenimiento la funcionalidad y operatividad de los primeros diseños, y teniendo en cuenta lo reducido de los espacios disponibles por los operarios en ciertas ocasiones, se descartaron los diseños de excesivas dimensiones y se desarrolló un diseño basado en una empuñadura clásica, de una mano.
En el diseño final de la empuñadura se incluyó también un sistema de parada de emergencia que no podía ser bloqueado, solventando así el principal problema de los sistemas actuales.